Por Laura Loría
La actual sociedad de comunicación generalizada ha entrado a jugar un papel decisivo como apoyo a estudiantes con Necesidades Educativas Especiales (NEE). Se rompen las fronteras de tiempo y distancia, nuevos ambientes de aprendizaje se hacen sentir en el escenario de la educación como componentes esenciales en este proceso de construcción y reafirmación del conocimiento que comprometen la reconceptualización de paradigmas antes tenidos para trabajar con estudiantes de condiciones especiales.
Los REA permiten a los estudiantes con NEE una educación humanizada, orientada a la realización integral y en la integralidad de un ser humano capaz, con posibilidades múltiples, las que son calificadas y trasformadas básicamente en el proceso educativo.
Se constituyen en un eje estratégico para bajar los niveles de discriminación y atraso educativo, aspectos para los cuales la educación cobra sentido e importancia, en un proceso de retroalimentación diaria y de una nueva práctica escolar.
Lamentablemente, son una minoría de profesores los que se comprometen y asumen retos para generar educación de calidad, que aprenden de la propia experiencia y construyen colectivamente para así crecer como profesionales y sobre todo como seres humanos, indistintamente si hablamos de estudiantes con necesidades educativas especiales o no.
Hoy nos encontramos con docentes utópicos que se alejan de lo real, se empeñan en su propio sueño educativo sin distinguir entre lo posible y lo deseable. Estima los esfuerzos del otro y de la comunidad educativa en forma independiente de las condiciones reales. No es capaz de proyectar, de moverse prospectivamente dentro de la viabilidad y factibilidad del proceso de aprendizaje, pierde la sensibilidad y cae fácilmente en el ascetismo absoluto, aislándose de la responsabilidad social que requiere trasformaciones en la educación para generar calidad de vida. Vive en el presente y de cara al pasado no posee soporte intelectual que lo comprometa con otro modelo de gestión.
Indiscutiblemente los REA enfocados a estudiantes con NEE poseen su propia dinámica caracterizada por la profundidad, la continuidad y la claridad de la información proporcionada al estudiante, además de la oportunidad y la productividad que puede generar para el docente.
Como docentes debemos recordar que la calidad académica de eficiencia profesional debe ser conjugada con cualidades de persona, cualidades mayormente requeridas por estudiantes con condiciones especiales.
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